M. Night Shyamalan es un director indio, pero todas sus películas han calado en la cultura estadounidense de filmes porque él es capaz de construir cosas que muchos directores de suspenso, desde la muerte de Aldred Hithcock, no han podido hacer, y también es capaz de darle la vuelta a las cosas. Cuando publicó "The Sixth Sense" en el año 1999, esta película y otras películas de 1999 como "American Beauty", "Matrix" y "Fight Club" popularizaron el concepto de "plot-twist", que consiste en hacer una magnífica revelación al final de un filme, cosa que sorprende y desconcierta al espectador. Por supuesto, la carrera de Shyamalan no ha sido fácil, ya que ha habido un montón de personas que, desde hace muchos años, han ido menospreciando su estilo de colores simbólicos, diálogos sencillos (en ocasiones extraños), ángulos de cámara misteriosos y también su obsesión por contarnos una gran revelación justo a minutos de que se acabe la película. Creo que formo parte de esa minoría de personas que admira casi la totalidad de películas de este hindú, aunque tampoco ignoro que él ha tenido fracasos (como "The Last Airbender"), de los cuales él ha aprendido a recuperarse hábilmente. En momentos en donde otros directores se han hundido por sus fracasos, Shyamalan los trascendió para mejorarse a sí mismo. Debido a ello, es un director cuyas películas me causan mucha admiración. 

Aprovechando la publicación de "Glass" este año, es por eso que hago este TOP, en donde veremos las películas de Shyamalan, las cuales se caracterizan por un suspenso similar al de Alfred Hitchcock, un simbolismo de color similar al de Kubrick y un estilo de diálogos tétrico y en ocasiones raro como los libros de Stephen King. Shyamalan siempre ha querido hacer una adaptación de Stephen King. Ojalá algún día lo haga. 
 

• Número 10: The Hapenning. Creo que formo parte de una minoría de personas a las cuales le gusta esa película, aunque admiro sin problemas que algunos de los diálogos, en pequeñas escenas de la película, me irritan un poco. Pero son fragmentos defectuosos en una película que, a pesar de que muchos la odian, a mí me causa temblor y me hace estremecer. Además, en una época de la década del 2000 en donde estaban de moda las "Disaster Movies", Shyamalan creó una película apocalíptica en donde la violencia no proviene de actos de destrucción masiva, sino de uno mismo. Dirigida por Shyamalan en el año 2008, la película nos cuenta que, en un día cotidiano en la costa Este de los Estados Unidos, en la zona de New York, Filadelfia y por ahí, la gente comienza a actuar de modo muy extraño, y finalmente, algunos comienzan a cometer suicidios masivos. Los personajes no saben lo que están ocurriendo, y los personajes comienzan a huir hacia donde sea con el objetivo de huir del peligro. Sin embargo, el peligro los acompaña en todo momento, ya que, sea lo que sea, hay algo en el aire que hace que aquellos que se infecten cometan suicidio, y eso es algo de lo que nadie parece ser capaz de escapar. La película es impresionante por su violencia pero también por el modo en el cual todo pasa tan lento y relajado, y es dificil de explicar qué es lo que está ocurriendo. No hay explosiones, no hay destrucción masiva, no hay escenas de tensión brutal. No es tu típica película apocalíptica. Por supuesto, a muchos no les gusta la película por los diálogos extraños, y a mí también me molesta un poco. Sin embargo, es fácil ver la película como una alegoría. The Happening es una película que nos cuenta muchas más cosas de la que nos muestra. 
  
  

 

• Número 09: Wide Awake. Nadie esperaría que un hindú criado en un estilo de vida religioso hunduista sería capaz de crear una película familiar estilo tragicomedia infantil en donde uno pueda tener algunas risas, reflexiones y lágrimas. Shyamalan, quien es un gran conocedor de la doctrina cristiana y conocimiento de occidente, creó su primera película como un arquetipo de las películas familiares en donde hay reflexiones sobre las injusticias de la vida que uno percibe desde que es un niño pequeño. Dirigida por Shyamalan en 1998, y siendo su primera película, esta película nos cuenta la historia de Joshua, un niño de 10 años que es la definición de un chico criado en un estilo de vida conservadora y simple, algo que quizá muchos no entiendan ahora. Pero Joshua tiene unos ciertos problemas porque, tras la muerte de su queridísimo abuelo, él ha entrado en una duda existencial. Todo lo que le han enseñado en su colegio religioso y en su casa le hacen decir que, porque su abuelo fue bueno, está en el cielo tras su muerte. Pero, ¿será esto verdad? Joshua quizá apenas sea un niño, pero él se hace las preguntas que toda persona se ha hecho en cierto momento de su vida. Claro que una comedia cristiana puede parecer una pérdida de tiempo para aquellos que no son religiosos o que no se interesan en ese aspecto de su vida. Sin embargo, a mí me gustó mucho, y no porque sea cristiano, sino porque la historia realmente entiende que a todos nos da un vacío existencial en un momento dado de nuestra vida, incluso a los creyentes. Shyamalan, quien a pesar de ser la India se crió en ambientes católicos y episcopales, en ocasiones parece entender más de religión y de occidente que los propios religiosos y occidentales. Wide Awake lo desmuestra. 
  
  

 

• Número 08: Lady in the Water. Shyamalan dijo que la historia de esta película se le ocurrió mientras estaba contándoselo a sus hijas cuando las llevaba a dormir. Qué lindo suena eso. Así se siente la película: como una de esas historias para reflexionar antes de dormir, y también un estilo de ensueño. Puede que la película no sea del gusto de muchos por el aspecto autoindulgente, pero al menos a mí me encantó el modo con el que Shyamalan transformó un cuento improvisado para dormir en una película dramática con un interesante plot-twist al final de la historia. Dirigida por Shyamalan en el 2006, y basada en un cuento que él mismo hizo para contárselo a sus hijas por las noches, la historia nos cuenta sobre Cleveland, un hombre de vida y pasatiempos normales; él trabaja en un bloque de departamentos y aunque tiene un trabajo cansado, cualquiera podría decir que tiene una buena vida y que es capaz de pasarla bien. Esto está por cambiar, porque un día descubre, en una piscina, una chica que quizá sea más que una chica, sino una ninfa. ¿Suena fantasioso? Más fantasioso sería que esta chica del agua promete devolver a la esperanza a nuestro mundo, pero para ello requiere la ayuda de Cleveland. ¿Él se la dará? Pues sería bueno que se vean la película. La película ha recibido críticas muy fuertes pero a mí me entretuvo bastante. Es una historia de suspenso que de todos modos retiene algunos momentos graciosos. 
  
  

 

• Número 07: The Village. No se trata de una película de terror, sino un filme que mezcla el terror con el romance, y crea una historia de un suspenso sentimental que trasciende el miedo y lo convierte en misterio. Cuando esta película se publicó, la crítica se dividió entre quienes la consideraban una obra maestra y entre quienes decían que era una obra pretenciosa que no daba nada de miedo. Dirigida por Shyamalan en el año 2004, la historia ocurre en un tiempo indeterminado, en una aldea muy alejada. No se deja en claro si la historia ocurre en el siglo XVIII o si se trata de una colonia Amish, y de hecho no importa demasiado. Hay una aldea alejada de todo, en donde las personas viven asustadas por extrañas criaturas misteriosas que viven en el bosque, que en ciertas ocasiones los atacan e incluso les causan destrozos. Sin embargo, un día estos ataques, que eran raros antes, ahora son cada vez más frecuentes y amenazan la estabilidad del lugar. Shyamalan crea una hermosa historia llena de simbolismos, y aunque el final algunos se sintieron decepcionados por la elección que tomó M. Night para terminar con el descenlace, el resultado es una historia que hace algo más que entretener, y es capaz de crear personajes con sentimientos, y un misterio que deseamos que se resuelva pronto. Shyamalan no hace películas de terror, sino historias humanas. Él es como sería Stephen King si es que él fuese director y no escritor (si nos olvidamos de "Maximun Overdrive"). 
  
  

 

• Número 06: The Visit. No se atrevan a decir que Shyamalan tiene pésimo sentido de las tendencias comerciales por grabar una película de género "Metraje encontrado" varios años después de que ese género pasó de moda, porque Shyamalan no busca crear una historia de horror genérica, sino usar dos estilos fílmicos y fusionarlos. La historia comienza como una comedia familiar y termina como un terror psicológico, y todo grabado desde la lente de una cámara casera, colocada en las manos de quien tenga que agarrarla. Dirigida por Shyamalan en el año 2015, la historia nos cuenta sobre dos jóvenes que nunca han visto a sus abuelos en su vida, y que finalmente se les ha permitido verlos por primera vez, durante una semana vivirán con ellos, alejados de sus padres. Ellos llevan una cámara para registrar la experiencia de conocer a estos parientes suyos. Ya desde el primer momnto en que los conocen se dan cuenta de que sus abuelos se comportan de modo muy extraño, aunque esto puede ser explicado por la edad y la senilidad que ellos tienen. Sin embargo, los dos jóvenes pronto descubrirán que hay algo mucho peor detrás de sus abuelos, y que la visita podría tornarse peligrosa. Shyamalan salta de un género a otro a mediado de la historia y al mismo tiempo es capaz de dar un plot-twist intenso al final de la historia. Shyamalan ha creado una de esas pocas películas de suspenso en donde te puedes reír en ciertos momentos, no porque sea mala, sino porque es muy buena. 
  
  

 

• Número 05: Glass. Apenas un año después de Infinity War, Shyamalan se la suda todo y crea su propio Infinity War, haciendo un crossover de sus propias películas y demostrando que todo lo que ocurre en sus filmes ocurre en un "shyamalaverso". En este caso, las películas que más evidentemente se conectan son las películas "Unbreakable" y "Split", dos historias sobre el nacimiento realista de un héroe y el nacimiento realista de un villano. Glass, por su parte, es la historia realista de un antihéroe dispuesto a hacer cosas malas para hacer cosas buenas. Dirigida por Shyamalan en 2019, esta historia no cuenta sobre tres hombres extraordinarios. David Dunn es un justiciero anónimo que tiene el poder de la invencibilidad, no pueden herirlo y no siente dolor. Kevin Wendel Crumb es un asesino en serie que sufre trastorno de la personalidad disociativo, con 23 personalidades, incluyendo una personalidad llamada la "Bestia", y cuando se convierte en ella se vuelve invencible y muy fuerte. Y finalmente el protagonista de esta obra, Elijah Price, un hombre con osteogénesis imperfecta, es decir, huesos frágiles, que tiene una inteligencia superior a cualquier humano que ha existido, aunque su cuerpo es frágil como para poder hacer las cosas por sí mismo. Los tres están atrapados en un psiquiátrico porque después de lo ocurrido en "Unbreakable" y "Split", se los considera locos y peligrosos. Pero quizá encerrarlos juntos es el peor error que hayan podido cometer. Shyamalan unifica sus películas y sus personajes en una película que no sabíamos que necesitábamos. Hermosa en colores, acción y diálogos, "Glass" quizá no es tan perfecta como esperábamos pero es un satisfactorio desenlace para una historia que Shyamalan tardó 19 años en armar. Además, el mensaje de la película (que hay personas con dones extraordinarios que no sabe que tiene) es optimista en un mundo que todavía no supera la mediocridad. 
  
  

 

• Número 04: Split. A pesar de que el trailer y todos los críticos del mundo vendieron esta película como una obra de terror, deberían saber que Shyamalan, al igual que Kubrick o Hitchcock, no están muy interesados en causar sustos al espectador sino en contar una historia interesante. Shyamalan no ha creado una película con fines terroríficos sino una tragedia en donde la víctima, el asesino, los testigos y los cómplices, todos conviven en una misma mente, la del atormentado protagonista, que al mismo tiempo es el villano. Dirigida por Shyamalan en el año 2017, la película nos cuenta sobre Kevin Wendel Crumb, un hombre atormentado; fue maltratado y abusado por una psicótica madre y abandonado por su padre, y eso lo llevó a desarrollar múltiples personalidades, 23 de ellas, de hecho. Él trata de vivir como puede con ese trastorno como un guardia de seguridad, pero un día algo comienza a salir de dentro suyo, una nueva personalidad peligrosa y brutal. Algunas de sus personalidades están dispuestas a obedecer a este nuevo ser que surge de su interior, mientras que Kevin y otras personalidades suyas están asustadas y no quieren lastimar a nadie. Sin embargo, cuando algunas de las personalidades de Kevin secuestran a Casey Cook, y a dos de sus amigas, las cosas se pondrán complicadas. Casey sabe que Kevin no es un hombre malvado sino atormentado, pero también sabe que si no encuentra un modo de vencerlo, no escapará con vida. Shyamalan crea una tragedia en donde todos los elementos de una conspiración terrorífica conviven en la mente de un solo personaje. Es una historia en donde el protagonista y el villano son la misma persona. El asesino y la víctima son uno solo. 
  
  

 

• Número 03: Signs. No hay nada más irónico que pensar que las "señales" que el protagonista desea le llegan, pero no son las "señales" que él hubiese deseado. Es una historia existencial que es capaz de crear tensión, miedo e intriga, y aunque el final es decepcionante, el resto de la película es tan fuerte y tan bien construida que da igual que sepas que el final te va a decepcionar. De hecho, y a pesar de que el "plot-twist" de Shyamalan es débil, es una de sus mejores películas. Dirigida por él en el año 2002, la historia tiene como protagonistas a Graham Hess, sus hijos y su hermano. Él era un predicador religioso pero después de la muerte de su esposa entra en un vacío existencial y decide retirarse a vivir en un lugar lejano, mientras busca las respuestas a sus preguntas. Él está en busca de una "señal" de Dios. Y un día, comienzan a aparecer extrañas apariciones alrededor de su granja y su casa, cosas que nadie sabe qué son. Y puede que para  Graham sea muy espantoso de soportar, especialmente porque todavía no ha logrado superar su crisis existencial, porque son "señales" que lo atormentarán más de lo que podrán aliviarle. Mel Gibson hace un trabajo impecable con esta película, y Shyamalan es capaz de construir una tensión en donde el drama cotidiano se mezcla con lo asuntos sobrenaturales como si fuera una película basada en un libro de Stephen King. El final, por supuesto, no es lo que uno quisiera. Pero igual, deberían verse este clásico del suspenso. Quien no se vio esta película cuando era un niño, no tuvo infancia. 
  
  

 

• Número 02: Unbreakable. En una época como el año 2000, en donde el mundo parecía aburrido y la gente creía que la ficción solo era ficción, Shyamalan creó una pregunta interesante: ¿Y si los súperpoderes fueran reales, cómo lo descubriría uno? Y para responder a esa pregunta, es que creó esta película. Mucho antes del Batman de Christopher Nolan, mucho antes que el universo Marvel, mucho antes que "Los Increíbles" de Pixar, Shyamalan ya había publicado Unbreakable. Dirigida por él en el año 2000, la historia empieza con un enigma: David Dunn es un hombre normal, está a punto de divorciarse y tiene un trabajo aburrido como guardia de seguridad de un estadio de fulbol americano. Un día, durante un viaje, el tren en el que va se descarrilla y todos mueren, pero él no solamente sale vivo, sino que es rescatado sin un solo rasguño. Él regresa confundido a sus estilo de vida, pero pronto es contactado por Elijah Price, un coleccionista que sufre de huesos frágiles. Es un hombre que está convencido, por medio de sus conocimientos avanzados y su inteligencia superdotada, que los súperpoderes existen, y que David los tiene. La película va averiguando esto. Shyamalan crea una historia que mezcla lo cotidiano con lo supernatural. Es como un libro de Stephen King pero convertido en película, y sin embargo es una historia completamente original que solamente Shyamalan sería capaz de hacer. Es una de las películas de superhéroes más anticipada del mundo y la más realista de todas. Y quizá la más simbólica de todos los filmes de Shyamalan. 
  
  

 

• Número 01: The Sixth Sense. Esta película es demasiado buena como para el propio Shyamalan. Es una de las obras de suspenso más famosas del cine contemporáneo, y quizá entre los mejores filmes de 1999. Trasciende tanto del resto de filmes de Shyamalan que es difícil imaginar quién podría haber sido la mente maestra que estuvo detrás de semejante historia. Magistral, sin duda alguna. Es una historia que no está completa sino hasta el final, un filme del que tienes que consumir cada segundo. Dirigida por Shyamalan en 1999, y siendo su segunda película y también su primer éxito a nivel global, esta película nos cuenta la historia de dos personas muy singulares. Malcolm Crowe es el primero. Es un reconocido doctor y psicólogo infantil, el cual vive obsesionado él también con un recuerdo del pasado, un paciente al que no fue capaz de ayudar. Queriendo redimirse, acude a la ayuda de Cole, un niño de ocho años que parece atormentado por visiones y alucinaciones, y que necesita un tratamiento inmediato. Pronto el Dr. Crowe comenzará a sospechar que Cole no sufre de esquizofrenia alucinatoria, sino que realmente tiene una terrible aflicción por ver "muertos". Y después de tanto asombro, la historia todavía tiene la energía suficiente para crear uno de los mejores "plot-twist" de la historia del cine. Fue la película que hizo que el tema de lo supernatural se volviese popular nuevamente y permitió también a Shyamalan iniciar una imperfecta pero poderosa carrera artística.