Mazoku
630
3.588 ATC
BABY BLUE
Nuestra historia comienza en una casa de lo mas normal aposentada en un barrio bastante agradable donde todos sus vecinos se ayudan entre todo esto nos centramos en una de ellas donde dos amigas una de ellas llamada Jennifer y su amiga de la infancia Marta van a sufrir una experiencia un tanto peculiar y sobrenatural…
Jennifer una joven de unos veinte años de estatura media con un pelo de color rubio liso con algunos bucles al final de este, sus rasgos muy suaves y redondeados con una personalidad muy extrovertida y de mente mas vierta hacia el terror siendo una de las cosas que mas le gusta y que nunca ha sentido miedo con respecto a ninguna película y busca emociones nuevas en este campo.
Al contrario que Marta con una personalidad un tanto miedosa y algo tímida con respecto a este tipo de cosas, su cabello es corto y negro con facciones un poco mas angulosas que su amiga, aunque siempre termina arrastrada por ella ambas se encuentran en el salón de su casa sentadas y dispuestas a ver una película de terror.
─ De verdad no se como me arrastras siempre a ver una peli de este estilo sabes perfectamente que las odio…─ dijo Marta mientras entraba en el salón con un bol de palomitas y vistiendo un pijama de color rosa bastante simple,, a la vez que se sienta en el sofá pasándole el recipiente a Jennifer.
─ En el fondo sabes que lo estas deseando…lo que no entiendo es por que te asustas es una simple película nada mas…con sus efectos especiales y listo…─ dijo Jennifer mientras comía algunas palomitas, y colocaba el dvd en el reproductor también iba vestida con un pijama de color melocotón, y la casa la tenían para ellas solas puesto que los padres de Marta habían salido y no volverían hasta el día siguiente.
En cuanto llevaban un buen rato con la película Jennifer no paraba de reírse mientras Marta se tapaba la vista de vez e n cuando y a veces incluso miraba por encima del hombro creyendo escuchar alguna cosa.
─ Fíjate si incluso se nota que es sangre falsa es increíble…Ja, ja, ja…─ dijo Jennifer mientras se carcajeaba por la película mientras que Marta no llegaba a casi mirarla.
─ A ver cuando termina…es que n ose como puedes verlo sin inmutarte…─ dijo Marta mientras se ponía los ojos en la cara por una nueva escena escalofriante.
─ Así nunca te insensibilizaras…necesitas ver algo mas de terror. como te he dicho son solo películas nada mas que efectos especiales…si incluso he jugado a la Ouija no pasa nada…─ dijo Jennifer mientras se carcajeaba de la película una y otra vez ante las escenas.
La película continuo su rumbo mientras Jennifer no paraba de reír y Marta colocándose las manos en la cara, en cuanto acabo ya eran cerca de medianoche Marta apago la televisión con algo de miedo no sabría si pudiera dormir esa noche con tanta imagen rondando su mente.
─ Sabes he visto hoy una especie de ritual por Internet…¿Quieres probarlo…?...─ dijo Jennifer con voz misteriosa mientras se encaminaba hacia la cocina para dejar el bol de palomitas a medico comer.
─ ¿Qué clase de ritual…?...─ pregunto Marta con algo de miedo en su voz mientras que imaginaba que Jennifer la volvería a liar en otro de sus experimentos.
─ Uno muy bueno…no te preocupes según he leído no es peligroso…¿Quieres intentarlo…?...─ pregunto Jennifer nuevamente para intentar convencerla pero veía en la cara de Marta que no estaba muy convencida de todo aquello.
─ Sabes que no me gustan esas cosas…─ dijo Marta con tono de miedo en su voz mientras se quedaba quieta en la escalera para subir al dormitorio.
─ Venga que no pasa nada, no te preocupes…además no da tanto miedo como piensas…─ dijo Jennifer mientras tomaba de la mano a Marta y la arrastraba piso arriba hacia el cuarto de baño.
Nada mas entrar en aquella habitación que no era muy grande al fondo de esta había una bañera y a su derecha un espejo del que se podía abrir, estaba alicatado hasta el techo de la estancia con unos azulejos de color blanco brillante en una de las paredes una ventana abatible que enseguida Jennifer cerro.
En cuanto estuvieron dentro Jennifer abrió el grifo del agua caliente dejándola correr por un poco de tiempo para que le vapor empañase el espejo, a la vez que apagaba las luces y se quedaban en la completa oscuridad, Marta sentía las manos de Jennifer en sus hombros en aquella ausencia de luz casi completa solo cortada por los automóviles que pasaban por la calle.
─ ¿Y ahora…?...─ dijo Marta entrecortadamente mientras escuchaba como el agua corría por la bañera y el vapor poco a poco empañaba el espejo en eso Jennifer se apoyo un poco sobre la espalda de ella y escribió en el espejo "Baby Blue" y puso las manos de Marta en posición como si acunara un bebe.
─ Solo mantente así…esperemos un poco…─ dijo Jennifer mientras se mantenía a la espera de lo que pudiera pasar si fuera verdad u otro fracaso encontrado por Internet.
─ ¿Qué se supone que debería de pasar…?...─ pregunto Marta con algo de miedo al ver que no ocurría nada, pero por dentro estaba mucho mas tranquila.
─ Pues vaya que decepción…─ dijo Jennifer después de estar esperando unos minutos pero en cuanto termino de decir esa frase se escucharon como unos gimoteos muy suaves provenientes de Marta.
─ Siento como si hubiera algo entre mis brazos…dime que eres tu Jennifer…─ dijo Marta casi tragando saliva al notar aquel peso y unos pequeños gemidos que provenían de sus brazos, estaba convencida que había algo que se movía lentamente.
─ Ha funcionado no puede ser…Es increíble…─ dijo Jennifer casi alegrándose de aquello por fin una de las cosas era cierta.
─ Puedo notar como un bebe entre mis brazos…es pequeño…puedo notar sus manos como se aferran a mi…─ dijo Marta mientras notando como algo tomara su brazo para agarrarse e intentar subir un poco mas arriba.
─ Perfecto funciona…Según ponía en el ritual ahora debes abrir los brazos y yo encenderé la luz…así se acaba…─ dijo Jennifer mientras ponía su mano en el interruptor para encender la luz.
Enseguida Marta abrió sus brazos pero empezó a sentir como aquella cosa intentaba escalar por su cuerpo lentamente, a la vez que podía sentir arañazos por sus brazos y ruidos de cómo la ropa se desgarraba.
─ Jennifer enciende la luz deprisa…Esta subiendo por mi cuerpo…Ay!...─ dijo Marta nerviosa mientras intentaba no moverse del sitio mientras notaba como aquella cosa se aferraba con fuerza para no caerse a la vez que aquellas pequeñas garras empezaban a hacerle cortes en su piel.
Jennifer se apresuro a encender la luz pero para su mala suerte un apagón se produjo en la zona que se encontraban en cuanto movió el interruptor se dio cuenta que la luz no se podía encender, tan rápido como pudo busco el pomo del a puerta para girarlo y salir de allí en busca de luz pero no había forma parecía como si estuviera atrancado de alguna forma extraña.
─ No puedo abrir la puerta…y la luz no se enciende…─ dijo Jennifer esta vez con miedo en su voz, era la primera vez aunque la conocía y que ella hablaba con ese tono siempre riéndose del terror pero aquella situación la empezaba a sobrepasar podía escuchar los gemidos de aquel ser que habían invocado y como su amiga gritaba de dolor ante los arañazos de aquella criatura.
Marta empezó a moverse por la pequeña estancia intentando quitarse de encima aquella cosa que no dejaba de arañarla una y otra vez podía sentir como la sangre resbalaba por sus brazos. cara y como los gemidos de aquel ser poco a poco se iban convirtiendo en risas macabras como si salieran del mismo infierno.
Jennifer intento mover el pomo y empujar la puerta pero no había forma aquello no cedía ni un poco, podía notar como su amiga se movía golpeando todo ante los ataques de aquel ser, por un momento, las luces de un coche ilumino brevemente el lugar dejándole ver una especie de bebe desnudo que estaba aferrado a su cabeza dando zarpazos y mordiscos su piel era de un color azul pálido.
Marta no dejaba de gritar una y otra vez mientras que Jennifer importante ante aquello forzaba la puerta como podía para salir de allí en un momento todo aquel alboroto ceso de golpe escuchándose un ruido sordo.
─ ¿Marta te encuentras bien…?...─ pregunto Jennifer con miedo en su voz mientras veía como el pomo de la puerta al fin cedía pudiendo abrirla, solo se escuchaban los gemidos muy suaves de aquella cosa terrorífica, como un relámpago bajo las escaleras y fue a buscar una linterna a la cocina.
En cuanto llego nerviosamente rebusco entre los cajones encontrando una linterna que enseguida encendió y empezó a subir los escalones para ver como se encontraba su amiga.
Aquella subida se le hacia cada vez mas larga, no podía mas que tragar saliva y esperar que su amiga estuviera bien.
La casa estaba completamente a oscuras solo la linterna daba algo de luz ante aquello, incluso los peldaños de la escalera parecía que crujieran bajo su peso, no se escuchaba nada solo unos pequeños gemidos y llantos provenientes del cuarto de baño.
─ ¿Marta…?...─ pregunto tímidamente Jennifer mientras apuntaba hacia el cuarto de baño sin llegar a entrar.
El silencio de la casa incluso pareciera amenazador y la oscuridad le daba un ambiente mucho mas escalofriante, reuniendo todo el valor que pudo se adentro en el cuarto de baño con la linterna como si fuera un arma en sus manos apretándola con fuerza.
Jennifer iluminaba temblorosamente el sitio mientras entraba en el cuarto de baño empezó a apuntar a todas partes hasta que llego a la bañera pudo ver como la pierna de Marta sobresalía de allí cuando la luz apunto a su cara la pudo ver su rostro desfigurado por los arañazos y mordiscos con una mirada de terror en sus ojos que pareciera mirarla, de la bañera seguía saliendo agua a la vez que la sangre de los cortes de su cuerpo se mezclaba con ella, enseguida pudo escuchar aquellos macabros gemidos en cuanto apunto con la linterna hacia de donde provenían pudo ver aquel pequeño ser sentado en el suelo un cuerpo amorfo regordete de color azul que estaba de espaldas a ella sentado y dándole golpes al agua con sus pequeñas manitas como si estuviera disfrutando de aquello.
Aquel ser en cuanto sintió la luz de la linterna se giro rápidamente Marta se puso la mano en la boca al ver aquel rostro regordete de color azul al que le faltaban los ojos del que solo habían dos agujeros negros como la noche, enseguida aquella cosa abrió la boca llena de colmillos puntiagudos mientras se ponía de pie torpemente y se acercaba a Jennifer.
Esta dejo caer la linterna al suelo, intento salir de allí pero la puerta se cerro de golpe de inmediato aquel ser soltó una risa macabra y de un salto ágil se lanzo a por ella esta noto como las garras y los colmillos de aquel ser atravesaban su carne como si fuera mantequilla mientras que su sangre se mezclaba con la de su amiga a la vez que caía al suelo al suelo gritando de dolor, pasado unos instantes solo se escucho la risa macabra de aquel ser en toda la casa…
FIN LEYENDA 1
P.D: Aqui os dejo unas cuentas leyendas vivas en forma de mini historias espero que os guste muchas gracias a todos .
Inició el tema
Mazoku
630
3.588 ATC
DARUMA SAN
Esta historia transcurre en un barrio sin la mayor importancia, aunque la vida de uno de sus habitantes resulta un poco sobresaltada por algo que no debería haber invocado aunque fuera por curiosidad…
Alexandra es una chica que no suele sobresalir mucho para nadie, es algo mas alta que el resto de sus compañeras de instituto, tiene el pelo moreno con rizos muy juguetones, su rostro es redondeado y dan ganas de pellizcar los mofletes, aunque su carácter es muy extrovertido y amigable no suele llevarse muy bien con sus padres, va como siempre al instituto del que tiene algunas amigas, que ahora mismo se encuentran comiendo en la hora de descanso después de una mañana agotadora de exámenes.
─ ¿Qué tal te ha salido el examen de matemáticas…?...─ pregunta una de las amigas que ahora mismo esta sentada en el césped en un parque cercano al instituto mientras toman el sol antes de volver a entrar.
─ Si te digo la verdad no estoy segura…no he podido repasar mucho…─ dijo Alexandra mientras se estira en el césped todo lo que puede disfrutando del buen tiempo.
─ Siempre dices lo mismo…y al final sacas un sobresaliente…─ dijo la amiga mientras arranca algo de césped y se lo tira encima.
─ ¿Cómo os ha salido el examen…?...─ dijo otra chica que se acerca al grupo, su cabello es rubio y con bucles, su rostro es algo mas afilado portando unas gafas que le confieren un aire intelectual.
─ Vaya mira quien tenemos aquí…a la empollona de turno…─ dijo la compañera mientras se sienta de golpe.
─ Quieres dejar de decirle eso…siempre te estas metiendo con ella…─ dijo Alexandra defendiendo a su amiga, aunque esta como siempre baja algo la cabeza y no pronuncia palabra.
─ Sabes que lo digo de broma…¿Qué es ese libro…?...─ pregunto la amiga de Alexandra mientras fijaba su mirada en un libro bastante grande que portaba la chica.
─ Me he pasado por la biblioteca y he visto…el libro es de leyendas e invocaciones…aunque no creo en nada de esto…solo es para un ensayo que me subirá nota…─ dijo la joven mientras se lo mostraba al grupo, en ese momento Alexandra se incorporo al instante con curiosidad.
─ A verlo…─ dijo Alexandra mientras empezaba a ojear el libro con interés, al mismo tiempo que sus amigas.
─ Vaya que cosas mas raras…¿A que no te atreves a hacer un ritual que salga al azar…?...─ dijo la amiga intentando retarla, sabiendo de sobra que a esas cosas le tenia algo de miedo.
─ No seas cría…esto es solo superchería, nada es real…─ dijo Alexandra mientras pasaba las paginas del libro una tras otra mirando por encima.
─ Muy bien si es solo superstición como dices…no te importara…─ dijo la amiga mientras tomaba el libro por lo alto de su cabeza y lo dejaba caer al suelo , en ese instante el libro se abrió por una sección pero una extraña ráfaga de aire hizo que las paginas pasaran rápidamente hasta quedar en una invocación distinta.
─ Joder que aire mas inoportuno…─ dijo la joven mientras abría los ojos y veía que la pagina era algo extraña estaba un poco mas arrugadas que las demás que hasta ahora no había prestado atención y podía verse la imagen de una figura alta de una mujer vestida con un kimono de cabellos largos del que solo salía algunas facciones de la cara y un solo ojo.
─ Muy bien este…─ dijo Alexandra señalando la invocación en cuanto lo hizo un escalofrío recorrió su espalda.
─ Vaya es algo escalofriante…¿Estas segura…?...─ dijo la joven de las gafas mientras miraba el dibujo y la invocación.
─ Si, no te preocupes no pasara nada…A ver que se necesita…─ dijo mientras miraba los componentes necesarios y viendo que no era muy complicado decidió hacerlo.
─ No es muy complicado la verdad…pues bueno mañana os diré si ha funcionado…Creo que deberíamos ir entrando que toca la siguiente tanda de exámenes…─ dijo Alexandra levantándose mientras su amiga recogía el libro.
Las siguientes horas fueron bastante pesadas no salían de un examen cuando se metían en otro, hasta que por fin llego la hora de la salida, por suerte sus padres habían salido y estaría sola en la casa hasta la mañana siguiente, así que era el momento perfecto para realizar la invocación.
Nada mas llegar a su casa soltó los libros y la carpeta en el sofá, viendo que no había nadie puso la televisión para hacerse algo de compañía, y enseguida empezó a poner la cena, apenas tardo unos momentos y se dispuso a comer viendo una película, una vez que hubo terminado tomo los libros y subió a la parte de arriba de la casa, encendiendo las luces a su paso, en cuanto llego a su cuarto se dispuso a estudiar un poco para los exámenes de mañana.
Estudiando paso el tiempo rápidamente casi sin darse cuenta la noche había llegado y eran casi media noche, estirándose en la silla se encamino hacia el cuarto baño recordando el ritual y lo que tenia que hacer nada mas salir de su habitación, la casa la hizo sentir incomoda parecía que esa noche la oscuridad estaba viva y atenta a lo que hiciera.
Por unos momentos se quedo mirando hacia el piso inferior incluso le pareció ver que las luces parpadeaban por unos momentos, empezó a convencerse que solo era auto sugestión.
Entro en el cuarto baño y empezó a desnudarse lleno la bañera de agua y entro sintiendo el frío en su piel.
Algo dentro de ella le estaba diciendo que no lo hiciera, pero intentaba convencerse de que todo aquello era solo sugestión por lo que pudiera pasar.
Antes de entrar en la bañera apago las luces del cuarto baño, la poca luz que entraba por el ventanuco que había en una de las paredes.
Se sentó en el agua y se dispuso a pronunciar la invocación mientras se enjabonaba los brazos y los hombros con los ojos cerrados.
─ Daruma San ven, Daruma San ven, Daruma San ven…─ dijo Alexandra repitiendo una y otra vez las palabras mientras seguía lavándose.
Pasado unos instantes escucho como un golpe seco en el piso inferior de la casa que hizo que se silenciara de golpe, por un segundo intento pensar que podría haber sido cualquier cosa menos eso.
Mientras seguía con el ritual empezó a notar como un aire frío llenaba la habitación, aquello hizo que su corazón se encogiera de golpe y casi instantáneamente una extraña presencia entro en el baño.
Estaba segura que aquello era cosa de su subconsciente que le estaba jugando una mala pasada, aunque siguió con el ritual de pronto sintió como si alguien apoyara la cabeza sobre su hombro empezó a notar un olor a putrefacción que lleno el lugar aquello hizo que se sobre saltara y terminara bañándose aun con los ojos cerrados palpo el cuarto de baño para encontrar la toalla, seguidamente salio de este y cerro la puerta enseguida abrió los ojos, mientras miraba hacia todas partes viendo que la casa estaba completamente en silencio solo se escuchaban los coches y las personas de la calle, aunque en ese momento sentía que había alguien mas con ella aunque no quisiera admitirlo pensando que era solo su mente jugando con ella.
Se fue hacia su habitación y se puso el pijama enseguida cerro la puerta y se metió en la cama, sabia que aquella noche tendría pesadillas por aquella tontería.
Aunque la noche paso tranquila, en cuanto los primeros rayos de sol impactado en su rostro abrió los ojos y se estiro un poco para despejarse, enseguida empezó a vestirse y a buscar los libros que necesitaba, en cuanto entro en el baño vi oque el agua que había dejado aun estaba que enseguida quito el tapón, por unos instantes sintió como si alguien estuviera detrás suya enseguida giro la cabeza para comprobarlo pero no había nadie.
─ Alex el desayuno esta listo…date prisa o llegaras tarde…─ dijo la madre con voz dulce anunciándole que podría llegar tarde y que ya estaba en casa aquella voz hizo que se sintiera un poco mejor.
─ Voy enseguida…─ dijo Alexandra mientras tomaba el cepillo y empezaba a peinarse cosa que le tomo algunos minutos.
Una vez que hubo acabado bajo y vio que el desayuno ya estaba listo, aunque sin pronunciar palabra empezó a desayunar y rápidamente salio en dirección hacia el instituto.
Mientras caminaba en dirección empezó a notar algo extraño como si alguien le siguiera, comenzó a girar la cabeza para comprobar pero solo vio lo de siempre muchos niños tomando los autobuses, la gente dirigiéndose al trabajo y poco mas el cielo estaba algo nublado y hacia algo de frío.
En su camino se encontró con su amiga que salía de su casa bostezando aun, mientras se restregaba los ojos.
─ Buenos días…¿Paso algo…?...─ dijo su amiga con impaciencia saludándole esperando que hubiera habido algún resultado.
─ Como ves sigo viva no ha pasado nada…Te dije que solo era superchería y nada mas…─ dijo Alexandra sonriendo, aunque cuando miraba de reojo hacia atrás asegurándose de que no había nadie podía ver una imagen de una persona en kimono con el cabello largo y casi tapándole la cara, esto hizo que girara la cabeza pero allí no estaba esa persona.
─ ¿Te ocurre algo…?...─ pregunto la amiga extrañada por el comportamiento de Alexandra.
─ No, nada no te preocupes…sigamos que hoy toca un día duro…─ dijo Alexandra esta vez cambiando el tono de su voz por algo mas preocupado.
En su camino se encontraron con su otra amiga que parecía que estuviera esperándolas durante un buen rato.
─ Buenos días…¿Paso algo…?...─ pregunto su amiga mientras se atusaba las gafas mirando las con extrañeza.
─ Que va es lo que te dije…solo tonterías…─ dijo la amiga mientras veía como Alexandra estaba mirando por le rabillo del ojo.
─ ¿Veis a alguien detrás de nosotros…?...─ pregunto Alexandra con preocupación mientras intentaba saber si lo que estaba viendo era cierto.
─ Si, mucha gente ya lo sabes…─ dijo su amiga mirando a toda la gente que se encaminaba hacia sus trabajos y los niños hacia las escuelas.
─ No es eso, llevo notando como si alguien me siguiera de la misma forma que vi en el dibujo del libro…─ dijo Alexandra con tono de miedo en su voz mientras intentaba confirmar con sus amigas que había alguien.
─ Pues no, no hay nadie…─ dijo su amiga mirando bien para asegurarse pero solo veía al a gente de siempre.
─ No se si es sugestión mía o algo pero desde hace un rato estoy viendo esa figura que me siguiera…─ dijo Alexandra con miedo en su voz, cosa que hizo que sus amigas se rieran.
─ Anda es mejor que te deje de bromas y sigamos, quieres asustarnos pero no te va a funcionar…─ dijo su amiga mientras casi la arrastraba del brazo para ir al instituto.
Una vez en el entraron rápidamente casi llegaron al final de la sirena, entraron en sus aulas y nada mas llegar el profesor empezó a pasar lista y a repartir exámenes.
Alexandra enseguida se puso a resolver los problemas mientras lo hacia empezaba a notar algo extraño como si alguien estuviera detrás suya aunque era improbable puesto que estaba al final de todo y ahí no había ninguna silla solo un armario al fondo de la pared.
Enseguida noto como si alguien apoyara la cabeza sobre su hombro en ese momento miro por el rabillo del ojo viendo ese rostro pálido y terrorífico con aquella melena de cabello negro tapándole la cara y aquel ojo mirándola fijamente que parecía que estuviera atravesándole el alma.
─ TOMARE!!!...─ grito Alexandra en plena clase mientras giraba la cabeza por un momento se sintió aliviada pero todos los compañeros se quedaron mirándola extrañados.
─ Señorita Alexandra…¿le ocurre algo…?...─ pregunto el profesor extrañado ante aquel grito.
─ He terminado…¿Puedo salir al baño un momento…?...─ pregunto Alexandra casi tartamudeando por el miedo al parecer aquel ritual se había puesto en marcha incluso podía oler a putrefacción casi a su lado.
─ Muy bien…salga…─ dijo el profesor mientras que Alexandra se acercaba a él para entregárselo rápidamente salio de la clase.
Pero en cuanto volvió la mirar por el rabillo del ojo volvió a verla nuevamente sabia que aquel ser no se detendría ni por un segundo y que el juego continuaba, cuando avanzaba hacia el baño no se escuchaba nada todo estaba en silencio solo los limpiadores estaban por allí, le parecía incluso que los fluorescentes parpadeaban a su paso.
A toda velocidad entro en el baño y se puso a mirar por debajo de las puertas si había alguien habiéndolo comprobado se coloco delante del espejo y empezó a echarse agua en la cara, pero en cuanto se hubo despejado pudo ver con claridad a aquel ser que estaba detrás suya.
Sus vestimentas eran muy viejas incluso tenían algunas roturas, su cabello era muy largo de color negro haciendo un contraste casi macabro con la palidez de su piel, en seguida pudo ver aquel ojo que no dejaba de mirarla, pendiente a sus movimientos por un instante vio como se acerco un poco mas a ella.
─ TOMAREEE!!!...─ grito Alexandra con todas sus fuerzas mientras que aquel ser se detenía el olor a putrefacción era excesivo casi le entraron ganas de vomitar enseguida salio de allí corriendo para escapar, su mente empezó a divagar entre palabras para acordarse de la palabra que tenia que decir para terminar aquel macabro juego.
─ A ver como era…─ pero aun así su mente no daba con la palabra exacta, pensó en ir a la biblioteca para comprobar ese libro o si había alguno parecido.
Mientras avanzaba miraba por el rabillo del ojo viendo a ese ser que continuaba persiguiéndola sin descanso, en cuanto llego a la biblioteca pregunto a la encargada sobre algún libro de leyendas de Japón y esta amablemente se lo dejo sobre una de las mesas.
Alexandra empezó a revisarlo ansiosamente pasando las paginas una tras otra pero no encontraba la forma de detener aquello de ninguna forma no había ninguna palabra que hiciera que se detuviera.
Empezando a notar de nuevo a aquel olor nauseabundo corrió hacia el cuarto de baño para tomar algo de aliento, en cuanto estuvo en el volvió a echarse agua en la cara mientras miraba al espejo que esta vez no había nadie, por un momento suspiro aliviada y bajo la cabeza.
Pero en cuanto sus ojos volvieron a mirar al espejo el miedo volvió a atenazarla aquel ser estaba a su lado con la cabeza apoyada en su hombro mirándola fijamente, no sabia que hacer estaba completamente aterrorizada, el espíritu parecía que estuviera esperando una orden pero el miedo hizo que no pudiera decir nada.
Alexandra vio como de aquel kimono andrajoso salía una mano completamente blanca y gélida la noto sobre su cabeza que empezó a tirar de su cabello, enseguida la puerta de uno de los baños se abrió pero en vez de mostrar el retrete contemplo como un agujero negro del que salían gemidos y gritos espantosos, Alexandra no pudo mas que gritar con todas sus fuerzas y revolverse para que aquel ser la soltara, pero fue en vano sus gritos parecían que no se oyeran mientras aquel ser arrastraba a su presa hacia su mundo.
Su mente intentaba acelerarse en todo lo que podía para recordar esa entupida palabra, que hacia que aquello acabara pero estaba completamente en blanco y en unos segundos fue absorbida por aquel agujero oscuro y frío…
FIN LEYENDA 2
P.D: Bueno espero que os guste muchas gracias a todos y un gran beso .
Inició el tema
Mazoku
630
3.588 ATC
ESCONDIDAS I
Un niño alguien tan normal como cualquier otra persona es capaz de llegar a invocar a los espíritus en un simple juego que llene su soledad…
Este niño se llama Paúl desde pequeño siempre ha estado enfermo y sus padres decidieron mudarse a una casa en las afuera, gracias a eso logro mejorar un poco, aunque nunca llego a estar bien; de cabellos rizados y negros con facciones redondeadas y carácter muy amigable y despierto de apenas diez años de edad siempre juega en el pequeño jardín de la casa bajo la mirada de su niñera, aunque se divierte a pesar de todo quiere conocer a otros niños y jugar con ellos, el tiempo esta despejado y corre un ligera brisa refrescando el ambiente mientras que imagina aventuras corriendo por el jardín.
─ Hoy pareces que te has levantado con mucha energía…─ dice la niñera una joven de pelo negro largo y ojos de color verde que se le echa como unos veinticinco años de edad, de un carácter muy agradable y comprensivo con el pobre muchacho.
─ Estoy muy contento mañana s mi cumpleaños…y papa y mama me han dicho que tienen una gran sorpresa para mi…─ dijo el niño mientras corría por el jardín con un avión en sus manos simulando una batalla.
─ Bueno va siendo hora de merendar toma…─ dijo la niñera mientras le ofrecía un sándwich y un refresco que rápidamente el niño soltó el avión y se dispuso a comer.
La niñera empezó a acariciar su pelo mientras este se apoyaba en un árbol merendado el día parecía pasar sin problemas alguno.
─ Vamos a la biblioteca…Allí es muy divertido con las escaleras…─ dijo Paúl cansado ya del jardín.
─ Sabes que es peligroso tu papa te lo ha dicho, podrías hacerte daño…─ dijo la niñera mientras le recordaba que no podía entrar mientras no estuvieran sus padres.
─ Que rollo…─ replico Paúl terminando de merendar y volviendo a su batalla imaginaria.
Entre tanto la niñera se acordó que tenia quehaceres en la casa y pensando que no le pasaría nada entro y dejando solo a Paúl este enseguida se dio cuenta y entro en la casa muy silenciosamente, vigilando a donde había ido la niñera.
Paso por el salón ,mientras esta estaba barriendo y acomodando algunas cosas, avanzo por la casa algunos metros y cuando llego a una puerta corredera la abrió muy despacio y entro en la biblioteca, la habitación era bastante grande en medio de esta había una mesa con varios libros abiertos en ella y una pequeña lámpara, al fondo había una gran ventana por la que entraba la luz del día en cada pared había una estantería de libros que llegaba hasta le techo y en estas una escaleras que se deslizaban por ellas
Enseguida sus ojos se posaron en ellas como si relucieran rápidamente se subió a una de ellas y dándose impulso se movió por toda la estantería a toda velocidad mientras su mente imaginaba multitud de situaciones.
Pasado un rato después de haberse estado deslizando vio que encima de la mesa había varios libros abiertos y enseguida su curiosidad hizo que empezara a mirarlos uno de ellos contenía algunas instrucciones sobre un muñeco de peluche, enseguida Paúl pensó que seria su regalo de cumpleaños, pero viéndolo mas de cerca se dio cuenta que venían algunas cosas que pensó que seria parte de la sorpresa pero que no encajaba en el peluche.
Mientras Paúl seguía leyendo atentamente4 aquello paso por su mente recoger los elementos para realizar aquello y ver que sorpresa era la que tenían preparada.
Una vez que la niñera hubo terminado de limpiar y preparar algunas cosas mas salio al jardín enseguida se fijo que no estaba Paúl y su avión aparecía tirado en el suelo, su mente empezó a pensar que le hubiera pasado algo.
─ Paúl, Paúl…¿Dónde estas…?...─ pregunto la niñera preocupada mientras miraba por todo el jardín pero al no obtener respuesta enseguida le vino a la mente que había estado hablando sobre la biblioteca.
Tan rápido como pudo entro en la casa y se dirigió hacia la biblioteca en cuanto abrió la puerta enseguida vio a Paúl que estaba mirando algunos libros que estaban en la mesita, al menos no estaba deslizándose con las escaleras.
─ ¿Se puede saber que haces aquí…?...Me tenias asustada…Vamos que es hora de que repases tus lecciones…Es que no te puedo perder de vista…─ dijo la niñera mientras se acercaba a Paúl que este permanecía absorto mirando el libro.
En eso la niñera zarandeo un poco a Paúl haciéndole salir de aquel estado en el que permanecía.
─ Me has asustado…Ya se lo que quieren comprarme mama y papa pero tengo que hacer algo para ver como es…me puedes ayudar…por favor…─ dijo Paúl casi suplicándoselo con aquella vocecilla y mirada infantil que derretiría cualquier corazón.
─ Vale…pero ahora ponte a hacer tus deberes…después hablamos sobre lo que hace falta…─ dijo la niñera mientras le sonreía, pareciera que no podía enfadarse con él.
Enseguida Paúl salio de la biblioteca hacia la sala de estar para empezar a repasar los deberes y las lecciones que tenia mientras que la niñera se sentaba en un sillón y se disponía a coser algunas cosas y acomodar otras.
Las horas pasaron casi sin darse cuenta y cuando llegaba la hora de cenar, Paúl se dirigió hacia la cocina y había varios platos para cenar.
Mientras cenaban este empezó a decirle las cosas que le hacían falta, la niñera extrañada empezó a cogerlas, pero aunque no parecían muy peligrosas salvo el cuchillo todo lo demás era de lo mas simple.
─ ¿De verdad que necesitas todo esto…?...Me parece algo raro pero bueno…─ dijo la niñera mientras reunía algunas cosas.
En cuanto hubieron terminado de comer rápidamente Paúl subió al piso de arriba entusiasmado, para ver de que es lo que se trataba, mientras esperaba la hora señalada empezó a jugar en su cuarto con varios peluches decidiendo quien seria al que escogería para hacer el ritual, mientras miraba entre ellos enseguida su vista se poso en un payaso algo descolorido que estaba en un rincón, aquel peluche ya estaba algo viejo y sus alegres colores apenas llamaban la atención, aunque a Paúl no le gustaba mucho por su sonrisa burlona y aquellos cascabeles que le ponían nervioso.
Al momento Paúl lo tomo y la niñera lo abrió por detrás mientras le sacaba el relleno rápidamente enseguida le echo un poco de arroz dentro de el, después de eso corto algunas uñas y las introdujo dentro de este en cuanto lo hizo la niñera empezó a coserlo con el hilo rojo en cuanto hubo terminado la ultima puntada sintió como si algo hubiera entrado en la habitación con ellos, la temperatura bajo algo dejando la estancia fría.
─ De repente hace frío…─ dijo la niñera mientras se frotaba los brazos para hacerlos entrar en calor mientras veía que Paúl no parecía ni siquiera notarlo y seguía mirando aquel payaso.
─ Bueno ahora tenemos que llenar la bañera de agua y echar sal…y en un vaso echar agua con sal… tenemos que apagar todas las luces de la casa…─ dijo Paúl mientras cogía aquel payaso por un brazo y lo arrastraba por todo el pasillo hasta el cuarto de baño.
Una vez estuvo allí abrió el grifo del agua y dejo que cayera un poco en la bañera mientras tanto se quedo mirando al muñeco y empezó a pensar.
La niñera bajo por algo de sal mientras que Paúl pensaba en que nombre ponerle al muñeco.
─ Colorines…Colorines…Colorines…Es mi turno…Te encontré Colorines…─ dijo Paúl mientras cerraba el grifo del agua enseguida la niñera subió con el vaso de agua y algo de sal que derramo alguna sobre la bañera mientras que Paúl introducía el muñeco.
─ ¿Y ahora…?...─ pregunto la niñera con algo de miedo en su voz mientras miraba la sonrisa malévola del muñeco.
─ Ahí que apuñalarle con el cuchillo…─ dijo Paúl mientras se acercaba al cuchillo que había traído la niñera.
─ De eso nada señoriíto eso lo hago yo…que puedes hacerte daño…¿Qué es lo que tengo que decir…?...─ dijo la niñera mientras tomaba el cuchillo, en cuanto lo hizo sintió algo extraño que parecía emanar de la propia cosa.
─ "Es tu turno", y después dejas el cuchillo aquí y nos escondemos…─ dijo Paúl enseguida la niñera realizo lo que le había dicho y salieron de allí cerrando la puerta, rápidamente bajaron las escaleras de la casa para llegar al piso inferior y esconderse, la única luz que había en la casa era la de la luna llena que entraba por las ventanas iluminando el lugar.
Mientras que Paúl se escondía detrás de un sofá comparado por la niñera que no entendía aquello, pero mientras el chico se divirtiera no habría problema, o eso pensaba ella…
FIN PARTE I
P.D: Bueno aqui dejo otra leyenda más esta vez en dos partes espero que os guste muchas gracias a todos y un gran beso .
Iniciado
1
60 ATC
espero con ansias la 2da parte
pd: sigue asi tus historias son muy buenas
Inició el tema
Mazoku
630
3.588 ATC
ESCONDIDAS II
─ ¿Y que se supone que tiene que pasar…?...─ pregunto la niñera extrañada mientras se escondía junto a Paúl, podía ver como el niño permanecía expectante y muy nervioso.
─ Según decía las instrucciones ahora el muñeco tendría que buscarnos…Es un juego de las escondidas…─ dijo Paúl completamente alegre esperando que pasase algo.
─ No creo que…─ dijo la niñera sin llegar a terminar la frase; en ese momento se espesaron a escuchar unos cascabeles provenientes del piso de arriba aquello literalmente le produjo un escalofrió a la niñera.
─ Ha funcionado…─ dijo Paúl entusiasmado mientras permanecía escondido detrás del sofá.
─ ¿Cómo que ha funcionado…?...No puede ser…─ dijo la niñera mientras escuchaba aquellos cascabeles moverse por el piso de arriba enseguida pudo escuchar como algo abría la puerta del cuarto de baño y el ruido de el cuchillo contra la pared deslizándose macabramente, mientras que los cascabeles se escuchaban cada vez mas cerca.
─ Que bien…─ dijo Paúl completamente nervioso mientras daba pequeños saltos detrás del sofá esperando que su amigo viniera a buscarlo.
─ Esto es una tontería…voy a ver que pasa…─ dijo la niñera saliendo de donde estaba mientras tragaba saliva completamente nerviosa era imposible que aquel muñeco viejo hubiera tomado vida.
Lentamente la mujer abrió la puerta mientras miraba hacia todos lados y se encamino hacia la escalera cuando llego a ella un repelus le recorrió la espalda, la oscuridad lo inundaba todo solo rota por la luz de la luna que incluso entraba tímidamente a la casa pareciera que no quisiera ver el espectáculo que se había creado, cuando miro hacia la escalera descubrió que el muñeco estaba sentado en uno de los peldaños con aquella sonrisa malévola y el cuchillo que le habían dejado a sus pies, parecía que estuviera vivo.
Solo tardo un momento en parpadear cuando volvió a mirar al muñeco descubrió que no estaba aquello le resultaba imposible pero aquel miedo de enseguida se hizo terror cuando escucho como una risa malévola que inundo la casa.
Enseguida la niñera salio corriendo hacia donde estaba Paúl y como un relámpago tomo al pequeño que parecía completamente contento y se cambiaron de habitación fueron directamente hacia la cocina.
Nada mas entrar dejo a Paúl debajo de la mesa y ella tomo un cuchillo en sus temblorosas manos.
─ ¿Qué pasa…?...─ pregunto Paúl extrañado viéndolo que hacia la niñera que estaba mucho mas nerviosa que antes.
─ Nada no te preocupes…─ dijo la niñera mientras tomaba firmemente el cuchillo entre sus manos, pero enseguida pudo escuchar como la puerta de la cocina se abría lentamente aquella visión le erizo la piel.
─ Colorines…─ dijo Paúl contento al saber que su amigo había tomado vida, pero enseguida la niñera le puso la mano delante de el para que no se acercara.
En ese momento se escucho una risa macabra junto con el tintineo de los cascabeles y el arrastrar del cuchillo por el suelo de la cocina cada vez mas cerca de ellos.
Enseguida la niñera tomo a Paúl de la mano y casi arrastrándolo lo saco de la cocina, aquello era imposible, aquel muñeco no podía estar vivo; rápidamente subieron las escaleras casi tropezándose en su camino hacia la habitación de Paúl.
Cuando al fin estuvieron arriba entraron en la habitación y apoyo una silla contra la puerta suponiendo que aquel muñeco no podría entrar en la estancia.
─ ¿Qué te pasa…?...─ pregunto le niño mas preocupado al ver que la niñera parecía completamente nerviosa casi con ganas de gritar.
─ ¿Cuanto dura este juego…?...─ pregunto la niñera completamente asustada, en ese momento se escucharon nuevamente los cascabeles detrás de la puerta.
─ No lo se… no lo ponía en el libro…Me estas asustando…─ dijo Paúl viendo como se encontraba la niñera el rostro casi lo tenia desencajado por el terror, en ese momento escucho como el repiqueteo del cuchillo contra la puerta y nuevamente esa risa macabra.
─ ¿Al menos sabrás como se detiene…?...─ pregunto la niñera mientras zarandeaba nerviosamente a Paúl.
─ Decía algo de apuñalar al muñeco tres veces…─ dijo Paúl nerviosamente, asustado completamente por aquello que no entendía.
Casi al momento el repiqueteo ceso de inmediato aquello incluso asusto mas a la niñera que hizo que Paúl se escondiera al rincón de su habitación, esta con el miedo atenazándole el cuerpo empezó a caminar lentamente hacia la puerta quitando la silla que había colocado.
Con el cuchillo en sus manos temblorosamente mira por la rendija que había abierto hacia el suelo pero parecía que no hubiera nadie, el pasillo estaba casi en completa oscuridad y apenas podía ver.
Cuando abrió la puerta se asomo al pasillo respirando aliviada al parecer el juego parecía que hubiera acabado, pero en ese momento escucho el grito de Paúl aquello no hizo mas que asustarla de golpe y se giro rápidamente para ver que es l oque pasaba.
Cuando entro en la habitación miro como Paúl permanecía mirando a la pared y el muñeco estaba tirado en el suelo aunque no parecía que Paúl tuviera ninguna herida al menos aparente.
─ ¿Paúl te encuentras bien…?...─ pregunto la niñera mientras se acercaba al muchacho que permanecía mirando a la pared y a su espalda el muñeco en el suelo pero no había ningún cuchillo cerca de el.
Cuando la niñera se acerco a Paúl y le puso la mano en el hombro, este se giro pero lo que vio ella le puso los pelos de punta la luna iluminaba un rostro maléfico incluso los ojos eran negros por completo y la sonrisa de Paúl era malévola, por un instante pudo ver como aquella costura escarlata se había roto y el cuchillo estaba en las manos del niño.
De pronto se escucharon unos cascabeles en la habitación y una risa macabra que la lleno.
─ Te toca esconderte…Ja, ja, ja, ja…─ dijo Paúl con una risa macabra mientras se escuchaban cascabeles….
FIN LEYENDA 3
P.D: Aqui os dejo la ultima parte de este juego de las escondidas espero que os guste muchas gracias a todos .
Inició el tema
Mazoku
630
3.588 ATC
UN REFLEJO VIVO I
Que es lo que podría pasar cuando mezclas la curiosidad de un joven y su hermano con un programa de televisión que no deberían de haber visto, aunque lo mas peligroso es que esta vez si llego a salir bien…
─ Venga subid a hacer los deberes…De mientras os preparare la cena…─ dijo la madre sonriendo mientras caminaba hacia la cocina para terminar de preparara la cena.
Ambos hermanos subieron rápidamente en cuanto llegaron soltaron la maleta encima de la cama ambos daban clases en la misma escuela uno de ellos es mayor que el otro tiene el pelo negro liso y algo despeinado de rasgos suaves y redondeados siendo un poco mas alto que su hermano y de constitución mas fuerte incluso para su edad su hermano tiene el mismo color de pelo que su hermano pero este es algo mas rizado de facciones algo mas duras y de tamaño mas pequeño y con una corpulencia algo mas débil.
Su cuarto es la típica habitación de unos niños pero con la excepción de que en vez de literas hay dos camas al fondo la ventana que da a la calle en un barrio tranquilo entre las dos camas ají una pequeña mesita de noche con una lámpara y en la otra pared un armario y a su lado un escritorio y junto a este un espejo que apunta hacia la cama del hermano mayor.
─ ¿Tienes muchos deberes…?...─ pregunto Aldric a su hermano mientras empezaba a sacar libros de la mochila.
─ Mas que tu seguro…¿Quieres ver lo que echan esta noche en la televisión?...─ pregunto Michael mientras empezaba a rebuscar algo en su mochila que parecia no dar con eso.
─ ¿A que hora lo echan…?...─ pregunto Aldric mientras tomaba algunos libros y se tumbaba en la cama a repasar.
─ Es sobre medianoche pero me han dicho en clase que esta genial…es sobre ocultismo y rituales…─ respondió Michael mientras sacaba lo que andaba buscando y se ponía en el escritorio para hacer los deberes.
─ Sabes que no podemos quedarnos hasta tan tarde…papa y mama nos lo tiene prohibido…─ dijo Aldric intentando ser mas responsable que su hermano que al parecer ya tenia planeado quedarse fuese como fuese.
─ No te preocupes…ellos se acuestan antes que nosotros…bajaremos sin hacer ruido…y pondremos la televisión baja…─ dijo Michael preparando un plan para poder ver aquel programa.
─ No lo se, no deberíamos verlo…─ dijo Aldric con tono de duda en su voz mientras empezaba a darle vueltas a aquello.
─ Eres un cobarde…si quieres no bajes lo veré yo solo…─ dijo Michael retando a su hermano, aunque estaba convencido de que no bajaría.
─ No soy ningún cobarde solo que sabes que lo tenemos prohibido…─ dijo Aldric recordándole la advertencia de sus padres.
─ Eres un cobarde y nunca te arriesgas así no conseguirás nada…─ le replico Michael con dureza en eso Aldric se lanzo por su hermano para iniciar una pelea entre ellos aunque Michael llevaba las de ganar al ser mas alto y fuerte que su hermano.
─ Ya estáis otra vez peleando…No me hagáis subir…─ dijo la madre gritando, en cuanto la escucharon ambos se separaron y continuaron con los deberes.
El tiempo paso tranquilamente y no volvió a escucharse nada en la habitación en ese momento la puerta de abajo se escucho.
─ Ha llegado Papa…─ dijo Aldric saliendo todo lo deprisa que podía casi incluso tropezándose, mientras que Aldric salía tranquilamente sabiendo que ya era la hora de cenar.
─ ¿Qué tal en el cole…?...─ pregunto el padre mientras tomaba a Aldric en brazos y Michael bajaba las escaleras tranquilamente.
─ Como siempre un aburrimiento…─ dijo Michael con cara de algo de desanimo, aunque su padre ya estaba acostumbrado a su comportamiento.
─ Venga que es hora de cenar…Buenas noches cariño…─ dijo la madre mientras le daba un beso cariñoso a su esposo.
Así después de esto caminaron hacia la cocina la mesa estaba colocada y había bastante variedad donde elegir, mientras comían empezaron a hablar de cosas sin importancia y de cómo habían pasado el día, cuando acabaron los padres se pusieron a limpiar la cocina y ambos hermanos fueron al salón a ver la televisión por un rato.
En cuanto acabaron los padres se sentaron en el sofá y se dispusieron a pasar algo de tiempo juntos viendo la televisión; las horas fueron pasando tranquilamente hasta que llego la hora de que fueran a dormir.
─ Va siendo hora de que vayamos a dormir…venga que mañana tenéis clase…─ dijo el padre que al momento todos se levantaron y el padre apago la tele ambos hermanos subieron rápidamente por las escaleras para su cuarto.
Se pusieron los pijamas y arreglaron las mochilas para el siguiente día después de eso se metieron en la cama.
Casi al momento entro la madre para darle a cada uno un beso en la frente y arroparles, seguidamente cerro la puerta pagando la luz, por un rato el silencio se hizo en la casa después de eso Michael se levanto y abrió muy lentamente la puerta mirando hacia todas partes, la casa estaba completamente a oscuras a veces se veían las luces de un coche que pasaba por la calle.
Bajo las escaleras lentamente pendiente que sus padres n ose despertaban, aunque le ambiente en la casa parecia mucho mas obscura de lo normal, cuando llego al salón se sentó delante del televisor y lo encendió comenzando a buscar el canal donde echaban ese programa tardo algo de tiempo en dar con el.
Cuando lo hizo el programa ya había comenzado e iba cerca de la mitad mientras que el presentador explicaba un ritual con un espejo que Michael le pareció bastante sencillo de hacer…
FIN DEL CAPITULO 1
P.D: Bueno aqui dejo la primera parte de esta nueva leyenda espero que os guste muchas gracias por todo.
Inició el tema
Mazoku
630
3.588 ATC
UN REFLEJO VIVO II
Mientras estaba viendo aquel ritual escucho como unos ruidos en el cuarto de sus padres, enseguida apago la televisión y subió corriendo las escaleras, en cuanto llego a su habitación se metió en la cama rápidamente.
─ ¿Qué tal era el programa…?...─ pregunto Aldric con interés por lo que había visto.
─ No esta mal, además estaban explicando como hacer un ritual muy sencillo con un espejo…sabes voy a intentarlo…─ respondió Michael intentando recordar lo que había visto.
─ Seria mejor que no lo hicieras…podría ser peligroso…─ dijo Aldric avisando a su hermano, pero este solamente le miro y seguidamente procedió a lo que estaba haciendo.
Seguidamente Michael se tumbo y empezó a dormir en eso Aldric pensó que no lo haría y siguió durmiendo, en la casa solo había silencio y oscuridad salvo algún coche que pasara pro la calle o el ruido de los camiones de basura aparte de la luz de las farolas que entraba en la habitación.
Michael solo pretendía estar durmiendo en eso por un instante abrió muy poco uno de los ojos y miro al espejo enseguida levanto tres dedos pero cuando miro en el reflejo solo había dos levantados, aquello le dejo de piedra prácticamente aquel ritual había funcionado cuando se levanto de golpe para comprobarlo se dio cuenta que en el cristal su reflejo había cambiado radicalmente y había tres dedos.
─ Bien perfecto ha funcionado…─ dijo casi susurrando Michael con alegría en su rostro viendo que aquel pequeño juego había salido bien y decidió seguir durmiendo.
La noche paso tranquilamente y a los primeros rayos de sol Aldric se levanto de la cama restregándose los ojos pero viendo que su hermano aun seguía en la cama.
─ Michael despierta…que tenemos que ir al colegio…─ dijo Aldric zarandeando a su hermano mientras este empezó a toser. enseguida pensó que podría haber sido por haberse levantado tan tarde y habría pillado un resfriado.
─ Estoy hecho polvo…Cof, cof…─ respondió Michael sin poder acabar la frase mientras tosía, enseguida Aldric llamo a su madre.
─ Vaya parece que has pillado algo de frío…será mejor que te quedes en cama por hoy…nosotros tenemos que ir al trabajo…pero volveremos enseguida de mientras descansa un poco…─ dijo la madre mientras le ponía una mano encima de la frente para comprobar que era verdad lo que estaba diciendo.
─ Qué suerte tienes…─ dijo Aldric mientras terminaba de vestirse y coger la mochila, en cuanto salio de la habitación el sueño fue venciendo lentamente a Michael, sin antes escuchar como los demás estaban abajo desayunando en cuando escucho como la puerta se cerraba sus ojos empezaron a cerrarse lentamente.
El día para Aldric paso de lo mas normal absorto a lo que sucedía en la casa, solo esperaba terminar y volver a ver como estaba Michael, aunque en el recreo empezó a escuchar sobre el programa que echaron la noche pasada y sobre ese un ritual con un espejo aunque no le presto mucha atención puesto que Michael no había hecho ninguno.
Pero aquello no era la verdad ya que Michael si había realizado aquel ritual y con algunas malas consecuencias, en cuanto Aldric salio del autobús y entro en la casa fue corriendo para ver como se encontraba Michael, en ese momento antes de entrar se quedo sin habla vio como una pequeño charco de sangre que había por el suelo, aquello sencillamente le hizo tragar saliva.
─ Michael…¿Estas bien…?...─ pregunto Aldric con tono de miedo mientras abría la puerta lentamente pero el espectáculo que vio le dejo sin habla toda la habitación estaba revuelta y las cosas tiradas por el suelo y lo peor de todo es que la mitad de su hermano estaba dentro del espejo parte de este estaba manchado de sangre que aun goteaba, Aldric no sabia como reaccionar empezó a mirar aquella escena dantesca cuando iba a salir se dio cuenta de un mensaje que había en la pared escrito con la misma sangre de su hermano, "NO SE TE OCFURRA HACERLO"….
FIN DEL CAPITULO 2
P.D: Bueno aqui os dejo el siguiente capitulo espero que os guste muchas gracias a todos .
Inició el tema
Mazoku
630
3.588 ATC
EL ASCENSOR
En un mundo donde casi nadie cree ya en los fantasmas ni en las apariciones, una joven descubre que aun existen cambiando su concepto de la realidad…
Clara una joven de pelo rizado hasta los hombros de color negro con ojos azules muy expresivos, aunque su mente siempre es lógica y se niega a aceptar todo lo que no puede demostrar o ver con sus propios ojos.
En una noche clara de primavera, el prometido de Clara la lleva a u apartamento después de una cena encantadora.
En cuanto llegaron a casa Alex aparca el coche en la entrada y empiezan a hablar de algunas cosas..
─ ¿Te ha gustado al cita…?...─ pregunta Alex sonriendo a Clara pensando que había sido maravillosa.
─ Me ha encantado la cena…Bueno estoy agotada…─ responde Clara mientras bosteza por cansancio.
─ ¿Quieres que tomemos la ultima en tu casa…?...─ pregunto Alex intentando apurar lo ultimo de esa noche.
─ Alex la cita ha sido estupenda y me he divertido mucho pero mañana tengo trabajo…lo siento mañana nos vemos…─ dijo clara interponiendo una excusa, el cansancio estaba haciéndole mella.
─ Muy bien como quieras nos vemos mañana…─ dijo Alex sonriéndole mientras terminaban aquella cita con un beso.
En eso Clara se dirigió hacia el piso como siempre abriendo la puerta de entrada, aunque muchas veces había pasado por el mismo sitio, aunque aquella noche parecia ser distinta, el portal era bastante amplio todo de mármol con una escalera y unas cuantas plantas para darle algo de ambiente.
Clara se dirigió hacia el ascensor para subir a casa, por unos instantes se quedo mirando como las luces parpadeaban unas pocas veces aunque aquello no llego a sorprenderla.
Por un instante se quedo mirando la cámara exterior que daba dentro del ascensor, no había nadie que estuviera en el, cuando llego abajo se abrió la puerta y vio que estaba lleno de gente con un aspecto algo blanquecino sus ojos eran de un color negro, aunque sus facciones eran completamente normales, Clara empezó a mirar de nuevo a la cámara y algo confusa volvía a mirar a la cabina del ascensor, la cámara no mostraba nada, retrocedió unos pasos sorprendida sin mencionar palabra.
El miedo y la confusión empezaba a apoderarse de ella, pero no podía pronunciar palabra.
─ ¿Vas para abajo…?...─ dijo uno de aquellos seres con una voz muy suave, como si resultara una invitación.
─ No, gracias parece muy lleno esperare al siguiente…─ dijo Clara con algo de miedo en su voz.
En ese momento la puerta del ascensor se cerro dejando a Clara un poco extrañada y viendo como al momento nuevamente se abría la puerta del ascensor, por unos instantes clara se quedo mirando hacia la cámara para comprobar si había alguien y esta vez parecia que estuviera vació.
Pero nunca se sabe cuando puede haber alguien y no nos demos cuenta….
FIN DEL CAPITULO 1
P.D: Bueno dejo otra reseña espero que os guste muchas gracias a todos .
Inició el tema
Mazoku
630
3.588 ATC
NO ABRAS LA PUERTA I
Que es lo que puede ocurrir cuando desobedeces una advertencia aunque sea por un e-mail, en este momento lo van a descubrir un par de amigos que ni siquiera se esperan lo que sucederá…
En un día normal Jhon se despierta estirándose entre las sabanas en su cuarto como todos los días cuando la maldita alarma de la radio despertador suena con aquella música odiosa,, Jhon es un muchacho algo reservado en lo que dice tiene el pelo de color castaño y unos ojos algo pequeños verdes, su complexión es atlética y aparte de un buen estudiante.
─ Venga dormilón llegaras tarde…que no tenga que volver a decírtelo…─ dijo La madre de Jhon abriendo la puerta y luego volviendo a cerrarla.
─ Ya voy…─ dijo Jhon mientras se levantaba y se restregaba los ojos, sabiendo que si se quedaba cinco minutos mas volvería entrar su madre pero esta vez para echarle agua, ya lo había hecho varias veces.
En seguida fue al cuarto baño y se lavo la cara despejándose del sueño que aun tenia, después de eso fue hacia su cuarto para coger unos pantalones vaqueros algo gastados junto con una camiseta de color verde pistacho y unas zapatillas de deporte, seguidamente tomo la mochila y bajo las escaleras para desayunar.
Al llegar a la cocina vio que el desayuno estaba puesto y el olor era delicioso pero no estaba su padre.
─ ¿Y papa donde esta…?...─ pregunto Jhon mientras empezaba a devorar unas tostadas y algo de zumo.
─ Hoy a tenido que irse mas pronto…venga date prisa si no llegaras tarde…─ dijo la madre mientras terminaba de limpiar algunos platos.
─ A propósito mama hoy he quedado para dormir en casa de Albert…desde allí iremos a su casa…─ dijo Jhon mordiendo despacio la tostada esperando la contestación de su madre.
─ De acuerdo pero recuerda que llamare para comprobar que estas allí…quiero que vayas directamente a su casa…¿Entendido…?...─ dijo la madre mientras le miraba seriamente, Jhon no pudo mas que sentir mientras terminaba de desayunar.
─ Bueno tengo que irme…Gracias…─ dijo Jhon mientras tomaba los libros y tragaba el ultimo trozo de tostada y salía de allí a toda prisa.
El día de momento se presentaba muy bien, el sol brillaba con fuerza pero una ligera brisa refrescaba el ambiente, la gente empezaba a salir a toda prisa de sus casas junto con los hijos para coger los autobuses, los bares parecían abarrotados de gente desayunando.
Jhon avanzo por la acera en dirección a la casa de Albert en su camino se quedaba mirando algunos escaparates, aunque casi nunca nada le llamaba la atención.
Ya cerca de la casa vio que Albert un chico casi de su misma edad con el pelo rubio y algo desaliñado con gafas, sus ojos eran de color verde apagado y sus rasgos suavizados con complexión algo mas gordita que Jhon, estaba esperándole afuera mientras miraba el reloj.
─ ¿Lo has conseguido…?...─ pregunto Albert esperando que pudiera quedarse esa noche.
Jhon sencillamente asintió con la cabeza viendo el rostro alegre de Albert, sabiendo que sus padres no estarían en toda la noche.
Ambos anduvieron pro la acera viendo a la gente darse prisa y los autobuses por todos lados, cuando llegaron al instituto ya estaban planeando que es l oque harían esa noche.
El colegio fue como siempre, las horas parecían eternizarse, Albert no hacia mas que mirar al reloj esperando poder salir de allí e iniciar su noche de juegos.
Cuando al fin llego la hora de salir ambos salieron corriendo en dirección hacia la casa de Albert para pasarlo en grande.
Una vez en ella subieron por las escaleras a toda prisa cuando llegaron al cuarto soltaron los libros en la cama de Albert el cuarto era bastante grande la pared estaba cubierta de imágenes de series manga había una estantería llena de mangas y dvds de anime, a su lado la cama enfrente de esta un ordenador y abajo una consola de videojuegos.
─ Ahora vengo un momento…─ dijo Albert mientras salía de allí a toda prisa, entre tanto Jhon empezó a cotillear entre los tebeos y los dvd para ver si encontraba algo que le gustara.
Casi al momento vio entrar a Albert con varios refrescos en la mano y bolsas de patatas, aquella noche iba a ser estupenda.
Enseguida ambos se pusieron a jugar con la consola a algunos juegos de carreras, después de eso jugaron a algunas cosas mas y seguidamente empezaron con el ordenador, las horas pasaron muy rápidamente ni siquiera se dieron cuenta que ya era media noche.
En ese momento el ordenador sonó haciéndole saber a Albert que un correo había llegado, cosa que le extrañaba puesto que casi siempre le llegaba spam.
Rápidamente miro esperando que fuera eso, pero cuando abrió se quedo muy extrañado al leerlo era una advertencia.
Ambos leyeron el mensaje,"Ellos saben que estas hay, no le dejéis entrar saben muchos trucos, aunque digan lo que digan aunque sean vuestros padres los que pidan ayuda no les dejéis entrar…".
Ambos se quedaron extrañados leyendo aquel mensaje pero enseguida Albert se puso a carcajearse pensando que seria una broma u algo así…
FIN DEL CAPITULO 1
P.D: Bueno aqui dejo otra reseñá espero que os guste muchas gracias a todos .
Inició el tema
Mazoku
630
3.588 ATC
NO ABRAS LA PUERTA II
Ambos se quedaron mirando la pantalla del ordenador por unos momentos y enseguida empezaron a sonreír.
─ Dios!, la gente no sabe en que gastar el tiempo…─ dijo albert riéndose de aquella advertencia pero sin embargo para mi me sonaba a algo muy real.
─ ¿Y si fuera real…?...─ dije con un tono de miedo e incredulidad al mismo tiempo, mientras miraba la pantalla del ordenador.
─ ¿De verdad te crees esto…?...─ dijo Albert completamente lleno desconfianza en el mismo.
En ese momento ambos nos asustamos cuando sonó el teléfono, Albert enseguida descolgó el auricular.
─ Diga...¿Quien es…?...─ pregunto Albert normalmente esperando que fueran sus padres.
─ No les abras, saben que estas en casa, por mucho que te supliquen o digan…conocen muchos trucos, pueden imitar voces…─ dijo una voz de hombre con miedo en la voz aquello hizo que Albert soltara le auricular de golpe, en cuanto lo hizo se escucharon unos golpes en la puerta como si llamaran con fuerza.
─ ¿Pero que…?...Diga…─ dije cogiendo el auricular del suelo pero sol ose escuchaba el típico sonido de que habían colgado.
─ Albert soy yo papa abre la puerta rápido tu madre ha sufrido un accidente…─ dijo una voz casi gritando desde el otro lado de la puerta, Albert enseguida bajo todo lo rápido que pudo y se puso delante de la puerta dudando en si abrir o no.
─ No abras, ya has visto el correo y la llamada…─ dije con tono de miedo mientras veía a Albert dudar5 sobre aquello.
─ Pero son mis padres…mi madre seguro que esta en peligro…─ dijo albert mientras su mano agarro el pomo de la puerta.
─ Albert por favor no abras…y si es una trampa…y si ese correo tenia razón…por favor…─ dije con miedo, pensando que lo mismo aquel correo tenia toda la razón y nos estábamos arriesgado por nada.
─ Cariño…estoy herida necesito un medico abre la puerta…─ dijo una voz de mujer con el mismo tono que el de su madre.
Esto hizo que Albert incluso dudara aun mas en si abrir la puerta, puesto que eran sus padres, pero tampoco podíamos arriesgarnos a lo que pudiera pasar.
─ Si, mama ahora abro…─ dijo Albert mientras giraba el pomo en e4se momento le agarre la mano apretándosela con fuerza e impidiendo que abriera.
─ No la abras por favor…─ dije casi suplicándoselo con la mirada, aunque la duda ya estaba en la cabeza de Albert.
─ Albert soy tu padre, abre la puerta…tu madre se ha desmayado…no podemos perder tiempo…─ dijo la voz nuevamente tentando y forzando aun mas que Albert pensara en abrir la puerta.
─ Tengo que abrir, mi madre se ha desmayado suelta…─ dijo albert con tono enfadado, en ese momento sabia que todo l oque le dijese no serviría de nada, mire hacia todos lados y vi el pequeño armario de la entrada, tan rápido como pude lo abrí y me metí dentro dejando la puerta entre abierta.
En cuanto Albert abrió la puerta fue como si fuera absorbido afuera podía escuchar los gritos de Albert eran como agujas que se clavaban en mi corazón y mi mente, los gritos solo duraron unos momentos pero aquel recuerdo sabia que me duraría siempre, cuando pensé que todo había pasado vi como el cuerpo de Albert caía al suelo a plomo mirando hacia el armadito donde estaba escondido, su cuerpo estaba cosido a garrazos y dentelladas por todas partes había sangre saliendo de su cuerpo a borbotones y aquella mirada se clavó a fuego en mi mente, después de eso la puerta volvió a cerrarse de golpe.
La policía vino y me pregunto muchas cosas que es lo que había sucedido y como paso pero no podía decirles nada estaba n completo shock, no sabia ni siquiera como había logrado sobrevivir.
Cuando ya hubieron pasado unos cuantos meses y al menos había podido olvidar en parte aquello, mis padres decidieron salir a cenar juntos por su aniversario, me encontraba en mi habitación jugando a algún videojuego cuando vi que me habían enviado un correo.
Cuando lo abrí descubrí que era el mismo que le habían enviado a Albert meses atrás aquello me dejo congelado en el sitio, pero al momento sonó el teléfono pensé que aquello solo seria una casualidad.
─ ¿Diga…?...─ pregunte con tono de miedo mientras me ponía el auricular en el oído.
─ No abras la puerta ellos sabes que estas ahí…─ dijo una voz y sin que dejase acabar en cuanto colgué el teléfono empecé a escuchar golpes en la puerta….
FIN DEL CAPITULO 2
P.D: Aqui dejo el siguiente capitulo espero que os guste muchas gracias a todos .
|