Un video publicado por Blake Grigsby se viralizó por redes sociales y llegó a tener más de un millón de visitas en Youtube tras demostrar lo que la desesperación y un cartel pueden llegar a hacer en Los Ángeles.
En la playa Venice Beach de Estados Unidos, el joven irlandés se detiene en diferentes calles a pedirle a todas las personas, incluyendo hombres, un beso a través de un cartel que dice: "Bésenme, estoy desesperado".
El mensaje tan directo provocó risas y sonrisas al principio, pero después muchas mujeres, niños, animales (obligados por sus dueños) e incluso hombres se detuvieron para besar al muchacho en las mejillas, orejas, labios y frente.
El joven irlandés publicó en su página de Youtube que además de conseguir una gran cantidad de besos, no se contagió de ninguna enfermedad.
Hasta el momento, el video tiene más de 1 millón de vistas a un mes de haberse publicado.
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