y del drama a los deseos, espero os gusten
TRES TRISTES PERO DULCES DESEOS
Era otro día de clase, Viernes, la última oportunidad de la semana para pedirle una cita a la chica que me gustaba, pero a parte del martes que reuní fuerzas para darle mi número de móvil, no me veía con fuerzas de acercarme a ella.
Otro viernes finalizaba sin cambios en mí vida, solo quedaba acostarme, y pensar que haría mañana.
Era muy tarde, las 03:00h, abrí los ojos bostezando y desvelado miré el techo, pensando en ella, y sin aviso previo, apareció delante de mí, un bicho al que intentaba golpear.
- (No soy un bicho, que te has creído) – ese pensamiento extraño me hizo sonreír, pero no me distrajo de mi objetivo de atrapar ese bicho.
Y cuando por fin lo tenía, BBBBBBBZZZZZZSSSZZZSSSSZZZZSS, una descarga me dejó humeante
y agotado, y para colmo el bicho se escapó de mi mano…
- ¡Que no soy un bicho joder! Ehem ehem, soy una hada madrina y te concederé tres deseos,…
- ¿Eso no eran los genios?
- Mira chaval, te estás sorteando otro calambrazo, o sea calla y escucha…
- Menudo geni…BBBBBBBBBBBZZZZZZZZZZZZZSSSSSSSSSSSZSZZZSZZZZ – sin duda perdí las ganas de decir nada más,…
- A ver criajo, estoy de prácticas y quiero acabar rápido, tengo que conceder 3 deseos, y aunque suelen concederlos a tres personas diferentes, si lo hago así acabo antes,… ah, otra cosa, los deseos solo puedo echarlos sobre ti, y solo duraran hasta las 03:00h.
- Mmmm – pensé bien mi primer deseo, sabía que necesitaba algo de valor para acercarme a ella – mi primer deseo, quiero ser vampiro – pensé que así podría sorprenderla.
ZAS, en un momento me crecieron los colmillos, pero no notaba nada más extraño, pero cuando me fui a acostar el hada empezó a gritarme…
- ¿¡Tu estás loco!? ¡Niño cierra la persiana que cuando salga el sol, si te desintegras me quitarán puntos!
- ¿? – no podía creer lo que había hecho, por culpa de mi deseo no podría salir de casa hasta la noche, y no podría comer ni beber normal,… – ¿no me podrías haber avisado de las consecuencias? ¿Qué tipo de hada madrina eres tú?
- Mira chaval, yo cumplo deseos, para ver consecuencias lárgate a un punto de información.
Esa hada me comenzaba a molestar, mi próximo deseo lo tenía que pensar un poquito mejor. Este error no podía volver a cometerlo.
De repente, mi móvil sonó, cuando respondí me sentí afortunado, era ella,… las 14:00h, llamaba para quedar conmigo en dos horas. Tan contento estaba que sin saber como acabé sentado en el techo, pero cuando me di cuenta de que por el día no podía salir,… BRUUUM caí dolorosamente al suelo, rechazando con una tonta escusa su oferta.
Pero no tenía intención de perder el día completo, cuando se puso el sol fue mi momento, era tarde, pero seguro que mi triunfal entrada por la ventana le sorprendería.
Al otro lado de la ventana, estaba ella, no pude contener las ansias de picar en su ventana, y aunque su primer instinto fue asustarse, en seguida abrió la ventana y me dijo que entrara junto a una sonrisa con la que declaraba que estaba loco.
Fue muy sencillo acercarse a ella, casi podría creer que lo estaba deseando, en segundos estaba cumpliendo mi sueño, estaba cogiendo la mano de la chica a la que amaba y aproximándome para besarla poco a poco, y tras rozar sus labios me incliné a besar su cuello mientras que ella susurraba, que a ese bonito momento solo le faltaba una rosa en sus manos.
Mis labios rozaron su cuello y mi boca se abrió un poco, mis nuevos colmillos rozaron su ¿suculento? ¿aromático? cuello,… pero, ¿¡en que estaba pensando!?
De un salto tan solo, salí por la ventana, no podía permitir que mi lógica se nublara, jamás querría dañarla, pero cuando fui a transformarme en murciélago, el miedo o las prisas quizás, me transformé en rata, sujetándome de milagro en el borde de la ventana, que para mi desgracia cerró con brusquedad y me hizo caer al suelo, un piso de caída puede ser muy doloroso, ahora lo se.
Me destransformé y miré a la ventana esperando que se asomara y pedirle perdón, pero tras cinco minutos, eso no ocurrió. Volví a casa a pie, el ánimo no me permitía transformarme, “ser vampiro es más duro de lo que creía”.
Al llegar a mi habitación tocaron las tres y mis colmillos menguaron, estaba agotado y me puse a pensar en voz alta, pensé que dada la oportunidad de besarla hasta la saciedad, solo me había faltado entregarle una rosa “ojalá me hubiera podido transformar en una rosa en sus manos para complacerla”.
Antes de darme cuenta, no podía hablar, tan solo transmitir mis pensamientos, me sentía extraño, a pesar de que no veía, sentía de algún modo mí alrededor. Entonces una vocecilla, me decía que la primera parte de mí deseo estaba cumplida, sentí que mi cuerpo flotaba hasta golpear suavemente en repetidas ocasiones un cristal.
Tras un minuto, sentí un suspiro procedente de una sonrisa, un suspirado “tonto”, me hacía comprenderlo todo, era una rosa en manos de mí amada. Pese a ver y sentir de manera diferente, reconocí enseguida el tacto de sus labios, como acurrucado a su lado me sentía de algún modo, agradecido por ese accidental segundo deseo. Tuve el honor de dormir entre sus brazos, sin duda lágrimas de felicidad hubieran mojado mis mejillas de poder llorar.
Al llegar la mañana fui depositado en un recipiente con agua, y de pasar el momento más feliz de mi vida, pase a vivir el más inacabable y pesado. Así hasta las tres de nuevo, momento en que volé de vuelta a mi habitación y volví a ser yo. Solo me quedaba un deseo, pero tenía que pensarlo,… para ello miré previamente algunas llamadas perdidas, y sonriente dije firmemente que ese Lunes, deseaba ser el confidente de la chica a la que quería, para saber que piensa. Y tal deseado, tal apagadas las luces, no notaba nada, ni luz, ni are, ni alguno de los sentidos, por un momento estuve aterrado, pero me consoló saber que pese a no saber que pasaba, a las tres volvería a ser yo.
La espera fue mil veces más eterna que cuando fui una rosa, pero finalmente, vi claridad, o la sentía más bien, y al momento, sin oír nada, sentí que me hablaban…
- Querido diario, ya no se que pensar, hace mucho que estoy enamorada de él, y cuando más creía que era correspondida, se fue sin más; no tenía que haberle pedido una rosa, tras dármela desapareció, yo le prefería a él. Después de eso, no ha respondido mis llamadas, ojala pudieras hablar y decirme si como yo, crees que solo juega conmigo.
Tras escribir en su confidente diario, volví a la oscuridad de un cajón, y a mi casa tocadas las tres, el hada no apareció más. El Martes tuve que ir al colegio con la bronca de mis padres por desaparecer dos días, y la de los profesores por faltar el Lunes,… Tuve la suerte de verle a ella, pero mi sonrisa fue respondida con un claro rechazo, giró su cabeza bruscamente. Poco después, cruzamos una sonrisa, supongo que el momento había sido hermoso, pero no era nada con el final que esperaba lograr…
- Suerte chico,…
Una voz de algún lado a la que respondí, “gracias serás una gran hada madrina”.